2013-12-12 Cr José Niveyro: A 30 Años De Democracia Los Supuestos Herederos De Alfonsin Desconocen La Voluntad Popular
LA DECISION POLITICA
Lo que sucede en Mercedes evidentemente responde a la decisión política del ricardismo de que Victor Cemborain no asuma como intendente aunque haya ganado legítimamente en elecciones libres y limpias. Los argumentos había que buscarlos o provocarlos ¿Y las causas? Solo podemos suponerlos. Por ejemplo, ¿Que no se entre a revisar las medidas tomadas a lo largo de 22 años de gestión? ¿Instalar un gobierno “títere” controlado por una mayoría automática en el Consejo que les garantice impunidad?
NECESITABAN UNA CONDENA
Entre los elementos que tenían a mano estaba la denuncia del ex intendente Jorge Molina contra Cemborain acusándolo de haberle propinado una trompada en el ojo, luego de que Molina lo insultara públicamente.
La denuncia databa de unos tres años. Bastó que Cemborain anunciara su candidatura para que rápidamente el expediente se activara. Otras causas más graves seguramente esperan la decisión de los tribunales, pero se abocaron a ésta. De cuatro profesionales oftalmólogos, uno de reconocido prestigio de la ciudad de Corrientes, tres dijeron que la lesión era leve. Solo una profesional dijo lo contrario. El Tribunal se quedó con esta última opinión. A otros acusados de delitos más graves la Justicia le concedió la probation u obligación de hacer trabajos comunitarios. A Victor Cemborain le negaron.
Había que condenar. Y se lo condenó. Era la herramienta que necesitaban para continuar con el Plan. Los argumentos leguleyos de artículos, incisos, leyes y citas enumerados en la larga y densa exposición del ex funcionario municipal ricardista autodenominado “vecino” estaban destinados solamente a hacer creer a la población que todo era legal.
LA LECTURA DEL VICE-INTENDENTE
No sabemos si el vice-intendente electo junto con Victor Cemborain es aun muy “inocente” en política o él y quienes le acompañan son parte del Plan o sus conveniencias políticas particulares hacen que se plieguen a la maniobra. Rápidamente se “prendió” de los argumentos de sus ex socios políticos y ahora nuevamente socios, los ricardistas. Y como Julio Cobos con Cristina o Federico Franco con Fernando Lugo del Paraguay, repetía a cuantos quisieran escucharlo que si Victor no podía, él estaba listo para asumir la Intendencia. Uno espera de quien supuestamente comparte un proyecto o por lo menos tiene algunas ideas en común que hicieron posible su alianza, un mínimo de SOLIDARIDAD frente al Plan conspirativo.
La decisión de desconocer la voluntad popular estaba tomada no bien Victor ganó las elecciones. Lo que hicieron y hacen después es simplemente seguir al pie de la letra el libreto. Nada iba a cambiar si Victor juraba antes o si se presentaba al llamado del Concejo Deliberante. Su presencia solo iba a darle un poco más de visos de legalidad.
Lo que debió hacer el Vice-Intendente era simplemente jurar y asumir su cargo y no reemplazar al legítimo Intendente electo. El argumento de que debía asegurarse la continuidad funcional del Municipio es falso. El Municipio dejó de funcionar, a la espera de resolución judicial. Se mantuvo la limpieza y recolección de residuos por decisión voluntaria de los trabajadores.
EL PAPEL DE LA POLICIA Y LA D.P.E.C.
Es lamentable que se utilice a la Policía u otras instituciones del Estado como la D.P.E.C. para lograr fines políticos particulares del gobernador y sus seguidores. De esto los radicales y otros opositores acusan diariamente al Kirchnerismo ¿En qué quedamos?
El gobierno provincial al ordenar a la Policía a instalarse y controlar la entrada y salida de personas al edificio municipal está violando flagrantemente la autonomía municipal consagrada tanto en las Constitución Provincial como Nacional. Sobre todo en momentos en que ni siquiera la Justicia local reconoce autoridad en el Ejecutivo. ¿Qué autoridad competente solicitó la presencia policial? ¿Quién ordenó a empleados de la D.P.E.C. a cortar la luz al edificio Municipal?
La visión de un simple ciudadano preocupado por entender
¿HACIA DONDE VAMOS...? Por Cr. José Niveyro