En pleno desarrollo de la llamada "Guerra Fría", allá por 1963, cuando tuvo lugar la crisis de los misiles soviéticos instalados en Cuba, aparece la primera "hot-line" o "línea caliente". Esta línea telefónica conectaba a Washington con Moscú, siendo conocida, en estos lugares del mundo, como "el teléfono rojo". Dicho contacto estaba al servicio de los máximos líderes de las potencias de entonces, y, supuestamente, solo se lo utilizaba para casos realmente significativos. Con el correr del tiempo, la Guerra Fría se terminó y "el teléfono rojo" perdió fama. Sin embargo, el término "hot-line", imprevistamente, recobró popularidad. Esto vino dado por el lado de las comunicaciones eróticas, pues en Argentina, desde hace unos años, se difundieron los llamados telefónicos con propósitos sexuales múltiples. Fue así que muchos personajes -especialmente miembros de la farándula nacional-, se volcaron a este negocio para lucrar con el sexo, los traumas y la cultura picaresca de nuestra sociedad. |